jueves, 16 de enero de 2014

La vieja Irene.

Un día como cada tarde, estaba sentada la vieja Irene tejiendo como de costumbre. la vieja Irene solía tener una mirada infinita al vacío; su piel seca, sus labios pálidos, su pelo blanco y su animo desbastado.
la imagen de la vieja Irene se seco a través del tiempo tal y como se seca un alma sin amor; tal y como se seca una rosa sin regar. la soledad la consumía cada vez más, un día en el que el viento soplaba y soplaba,
la vieja Irene dice -"como es que la vida pasa y una sigue sin sentirla viva.!".
entonces el viento sopla delicadamente cercano a su cuello.. -"como es que tu alma ya vaga solitaria y apenada, alejando todo sueño de la mínima esperanza!".
la vieja Irene le responde al viento diciendo, "solía vivir, pero mi alma muerta se fue en vida". 
el viento apenado le murmura con calma, -" he oído historias, llantos, risas, penas y carcajadas que me hacen sentir y deslumbrar que la vida esta llena de emociones y que yo como viento o brisa, cada vez que soplo me llevo algo de lo que recibo, una huella de cada ser. y tu ahogando tu alma en penas, dejando que la vida pase ante aquella mirada desbastada de la misma.
lo único que puedo ofrecerte mi vieja Irene, es llevar junto conmigo las palabras que salen de aquel desolado corazón, que en verano siente frío de aquella eterna lluvia de tristezas.
la vieja Irene sorprendida y desesperada, le grita al viento..- ! te ruego mi brisa, mi viento.. desvaneseme en un soplo y hazme sentir viva como si recién llegase al mundo, inocente y tan ansiosa!.
el viento confundido le responde a la vieja Irene, -! ay mi querida Irene, sabes que si lo hago tu alma se ira junto con mi cálida brisa y tus tejidos y bordados, quedaran sin una mano  que los termine y todo lo construido sera destruido, como si la vida hubiese sido en vano.!
la vieja Irene con una pequeña luz en sus ojos brillando, le dice con la voz de su alma.. - concédeme este deseo, este favor, esta necesidad mía que tengo. mi alma ya se siente muerta y sin sentido; ahora solo me queda visitar tal y como tu, los secretos de cada rincón del mundo, de cada rincón de  la vida.
si mi vida fue en vano, no lo lamentare mientras mi muerte así no lo sea.  ¿quien dice que la vida no existe después de la muerte?, quiero poder descubrir en muerte, lo que en vida no logre sentir.
el viento asombrado de cada una de las palabras de la vieja Irene, desvaneció su cuerpo con un profundo y delicado soplo, dejando un leve polvo gris que poco a poco caía por encima de los tejidos y bordados. 
así fue como el alma de la vieja Irene paso a ser parte del viento, recorriendo juntos hasta el ultimo rincón del mundo, el ultimo rincón de la vida. irene logro entonces, percibir en muerte la gracia y ansias de la vida. 
el viento una noche le comente a la vieja Irene.. -!que raro es que tu muerte te haga sentir tan viva, tan joven y que la vida misma te hizo sentir tan muerta, tan acabada.
Irene le responde tranquilamente, - "la vida y la muerte son opuestas, pero a su vez en ambas lo único que siempre vive es el alma. la diferencia es que muchas veces el alma ansia morir para poder vivir, quizá el tormento de una vida terrenal es el simple hecho que ella termina contigo mismo, termina con tu paz, termina con tu armonía y serenidad.. y ese, en ese momento es donde al alma llora por la calma y el sonido del silencio eterno, esa sensación de volar hacia el universo para acabar con lo terrestre y con las personas que poco a poco se los come la rutina y la humanidad sola, escondida tras un par de tejidos y bordados, sueña  en aquella sintonía, en aquella conexión espiritual del universo con nuestras almas."
el viento entonces murmura..- !ay viejita Irene!, el universo te recibe entonces para que ahora tu vallas en busca de aquellas almas que al igual que tu, desean paz y tranquilidad. la espiritualidad para ti es mas que un tejido y un bordado, es un tesoro que hay que rescatar, y ahora tu al igual que yo, volaras por los cielos y devolverás al universo aquellas estrellas que cayeron y se apagaron, y tu las traerás de vuelta para que brillen por los cielos del universo, tal y como a ti,  estos cielos las quieren de vuelta.

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